Para mí dar clases online no es un plan b

talleres de escrítura

Antes de todo esto:

Yo vi a muchas mujeres correr con el transporte, con la rutina, con la crianza… todo para poder darse un espacio lúdico y creativo. 

También vi a personas de otras ciudades tener que elegir entre mudarse o quedarse afuera de aprender aquello que les apasionaba, simplemente porque en sus lugares de origen no se ofrecía. 

La vida me llevó a trabajar en una universidad nueva del conurbano bonaerense, en donde vi el área de educación a distancia pasar de un apunte en un post it a una infraestructura con decenas de docentes y miles de estudiantes. 

Aprendí todo sobre educación a distancia y soñé con un espacio online de escritura creativa que llegue a quienes no pueden acceder de otra manera.

Con el comienzo de esta extraña era, muchas personas que daban o tomaban clases en modalidad presencial se tuvieron que volcar a la versión online. De golpe se encontraron con Zoom, con usuarios y contraseñas, con chats y ruidos ambiente…

Hoy, que lo online ya es moneda corriente, reafirmo que es mi elección. Con su propio método, sus tiempos, sus ritmos. Y le pongo todo, eh: al aula virtual, a los encuentros online, a los grupos…

Hoy parece una obviedad, pero siempre hubo personas que de otra manera no hubieran podido acceder. Y sé que aunque algunas cosas se acomoden, esas personas van a seguir necesitando este espacio, esta modalidad. Para ellas, trabajo. Por ellas, para mí, lo online no es un plan B.

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