7 frases de Elena Garro

7 frases de Elena Garro

Cuando pensamos en literatura mexicana, es difícil no recordar a Elena Garro. Nunca voy a olvidar la primera vez que uno de sus libros llegó a mis manos porque fue de la manera en la que llegaron todos mis autoras favoritas: inesperadamente. Una de mis amigas me regaló “Los recuerdos del porvenir” y una vez que lo empecé, no pude parar. Fue entonces cuando investigué más acerca de la mente creativa detrás de esa obra y me asombré por su historia e impronta.

Elena Garro fue una de las guionistas, periodistas, escritoras y activistas mexicanas más cautivadoras de su país. Pocos saben que también exploró artes como la danza, la actuación y la coreografía. Sus escritos hablaban sobre temas transgresores para la época, abordando la problemática de la marginación de las mujeres, los indígenas y los campesinos. Elena luchó a través de sus palabras por su libertad social, cultural y política.

Entre sus obras más destacadas podemos encontrar “Un hogar sólido” (1958), “Andarse por las ramas” (1958), “Los pilares de doña Blanca” (1958), “La semana de colores” (1964) y “Los recuerdos del porvenir” (1963), novela que le valió un Premio Xavier Villaurrutia.

Frases de Elena Garro

Elena Garro fue una mujer profundamente conectada con la creatividad y las palabras, por lo que lograba movilizar muchos corazones a través de su lenguaje poético. Estas son algunas de sus frases que más me inspiraron:

“Alguna vez te encontrarás frente a tus acciones convertidas en piedras irrevocables como ésa, me dijeron de niña al enseñarme la imagen de un dios, que ahora no recuerdo cuál era. Todo se olvida, pero se olvida sólo por un tiempo. En aquel entonces también las palabras me parecieron de piedra, sólo que de una piedra fluida y cristalina. La piedra se solidificaba al terminar cada palabra, para quedar escrita para siempre en el tiempo.”

“Estoy y estuve en muchos ojos, yo solo soy la memoria y la memoria que de mí se tenga”.

“Mi gente es morena de piel. Viste de manta blanca y calza huaraches… Se adornan con collares de oro o se ata al cuello un pañuelito de seda rosa. Se mueve despacio, habla poco y contempla el cielo. En las tardes, al caer el sol, canta.”

“Adelante de los pasos de un hombre siempre van los pasos de una mujer.”

“Extraviados en sí mismos, ignoraban que una vida no basta para descubrir los infinitos sabores de la menta, las luces de una noche o la multitud de colores de que están hechos los colores. Una generación sucede a la otra, y cada una repite los actos de la anterior. Solo un instante antes de morir descubren que era posible soñar y dibujar el mundo a su manera, para luego despertar y empezar un dibujo diferente.”

“¿Usted conoce México? Pues Gabriel es como México, lleno de montañas y de valles inmensos… Siempre hay sol y los árboles no cambian de hojas sino de verdes…”

“El pasado ofrecía el encanto de lo irrecuperable. Lo perdido se convierte en algo precioso, en algo apenas entrevisto, evocado casi a voluntad, en la esencia más pura del presente.”

Para saber más acerca de Elena Garro, seguí leyendo…

La carrera de Elena Garro

A pesar de su increíble talento, la carrera de Elena Garro fue atravesada por múltiples factores personales y sociales que le impidieron obtener el reconocimiento que merecía en vida. En el año 1936, una joven Elena comenzó a estudiar letras españolas en la Universidad Nacional Autónoma de México. Ahí conoció a Octavio Paz, reconocido escritor quien sería más adelante su esposo.

Al contraer matrimonio, Elena abandonó su carrera en la UNAM para viajar junto a Octavio a aquellos países donde el escritor contaba con oportunidades académicas y laborales. Más adelante, Garro confesaría que su marido no le había permitido continuar con sus estudios y que incursionó en el periodismo para ganar dinero sin opacarlo.

En los viajes que realizó con Octavio, Elena se relacionó con los más importantes intelectuales de su época y se inspiró para dar comienzo a su carrera literaria. Sus primeros escritos son un volumen de obras de teatro, su novela “Los recuerdos del porvenir” (1963) y el libro de cuentos “La semana de colores” (1964). Aun así, Elena es exiliada del país en 1959 a causa de su activismo social. La carrera de Elena se detuvo diez años por esto.

En su regreso a México, la escritora y dramaturga continúa su trayectoria literaria. Desde 1973 hasta 1992, Elena publicó numerosas obras como “Reencuentro de personajes” (1982) y “Memorias de España 1937” (1992). En estos años, Garro cultivó la mayor parte de su obra, hasta que falleció a los 77 años producto de una insuficiencia respiratoria y cardíaca.

Los libros de Elena Garro

Elena se destacó en la dramaturgia y muchos consideran que inició el realismo mágico, un estilo que funde naturalmente lo verdadero y lo fantástico. En un momento donde los campesinos, indígenas y mujeres eran fuertemente invisibilizados, esta escritora supo retratar sus historias y señalar las desigualdades que sufrían. Haremos un breve recorrido por su obra y legado.

Andarse por las Ramas (1958)

“Andarse por las Ramas” es una emotiva historia acerca de una mujer llamada Titina, quien posee una gran creatividad y poética. Titina se encuentra casada con don Fernando, un hombre que la oprime y no comprende su naturaleza. La única conexión que la ilumina proviene de Polito, su hijo, con quien se permite ser en libertad y dejar su imaginación volar. En este libro, acompañaremos a Titina en su búsqueda de encontrar un espacio dispuesto para su particularidad y construir un refugio “yéndose por las ramas”. Este proceso lo vive también a través de su vinculación con los hombres y lo que ellos imprimen en su propia experiencia, algo que interpela e invita reflexionar a sus lectoras.

Los Recuerdos del Porvenir (1963)

“Los Recuerdos del Porvenir” es la primera novela de Elena. A través de la magia que enhebra su relato, el pueblo de Ixtepec cuenta el miedo que sufre su población desde que los militares pisaron sus tierras. El general Rosas es quien riega sus calles con cadáveres, mientras que Julia se resigna a vivir a su lado. Todo esto cambiará el día que llega Felipe Hurtado, un extranjero que transformará el curso de la historia. Gracias a su talento con las palabras, en “los Recuerdos del Porvenir” Elena nos cautiva con la trama y nos enseña acerca de la historia de su país.

La Semana de Colores (1964)

Siendo un medio de exploración de la historia mexicana y posterior a la publicación de “los recuerdos del provenir”, esta obra es una colección de trece cuentos que se desarrollan en mundos rurales y urbanos. Paisajes mágicos y fantasiosos relatan historias de injusticia social y pobreza, llevando al lector conocer diversas épocas históricas de México. A través de lo místico de la cosmovisión indígena, Elena rompe la visión occidental de la realidad y aborda las problemáticas propias del ser humano desde esta nueva perspectiva. Este libro contiene uno de sus cuentos mas famosos, titulado “la culpa es de los tlaxcaltecas”.

Reencuentro de Personajes (1982)

En esta obra, Elena funde lo real con lo literario y relata de manera impetuosa una historia a través de una estructura vinculada al thriller. Esta novela relata la historia de Verónica, una mujer que escapa con su amante Frank bajo la sospecha de que el mismo cometió un asesinato y temerosa de su involucración en todo aquello. En su desarrollo, nos encontramos en constante tensión debido a las idas y venidas de estos dos personajes fugitivos. Una de las características significativas de este libro es que involucra en su trama a Scott Fitzgerald y su obra, fundiéndola por completo con su desenlace.

Memorias de España 1937 (1992)

No existe experiencia más fascinante que adentrarse en la profundidad de los pensamientos de una persona como Elena Garro. En “Memorias de España 1937”, la escritora nos relata su experiencia en España cuando asistió al II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura junto a Octavio Paz y su retorno a México ese mismo año, junto a su paso por ciudades americanas y europeas. En esta época, España se encontraba en guerra y Elena retrató en sus diarios un país en conflicto desde su perspectiva de extranjera. No solo incluye sus memorias sino que también añade anotaciones de años posteriores, las cuales se reencuentran con lo anteriormente experimentado.

Para reflexionar:

Una de las cosas que más me sorprende es que probablemente todas las personas que conozcas sepan quién es Gabriel García Márquez y hayan leído, o al menos escuchado, sobre 100 años de soledad. ¿Cierto? Sin embargo, ¿cuántos conocen a Elena Garro, a Los recuerdos del porvenir o Andamos huyendo Lola? A veces pienso en por qué no me han dado a leer al menos un cuento de esta autora en toda mi trayectoria escolar y académica cuando, sin dudas, sus escritos son precursores en temáticas, géneros y procedimientos de mucho de lo que sí me han dado a leer. ¿Te pasó igual? 

Por favor, te pido que te tomes un minuto para pensar este asunto: ¿cuántas autoras mujeres había en tus programas de estudio?

Ahora sí, sigamos con lo que nos convoca…

Elena Garro fue una mujer activista que supo fusionar la poesía con la política y construir escenarios mágicos que relataran la realidad de su país. Sus obras son ideales para aquellos momentos que necesites palabras que toquen fibras sensibles y te inviten a reflexionar sobre tu entorno y a transformarlo.

 

Acá podés compartir este post

SUSCRIBITE A MI NEWSLETTER GRATUITO Y RECIBÍ INSPIRACIÓN Y HERRAMIENTAS PARA ACERCARTE AL MUNDO DE LA LITERATURA